19.1.07

domingo, 19.01.1807 – la marcha a Montevideo

Tras el desembarco, Auchmuty decide la marcha hacia Montevideo, para iniciar el sitio de la ciudad. Divide sus fuerzas en tres columnas. La primera está al mando del general Lumley (con lo mejor de su ejército); la segunda, al mando del coronel Browne. Backhouse queda en la retaguardia, con una pequeña reserva.

Auchmuty se suma a la columna de Lumley y espera vivaquear, esa misma noche, en las lomas que dominaban la ciudad, en las Tres Cruces. Browne y Backhouse debían seguirlos, pero sin apurar la marcha, para apoyarlos en caso de que fuera necesario.

A poco de avanzar, la columna Lumley es atacada por los hombres de Sobremonte, poco más de mil soldados, con la caballería de Allende a ambos flancos.

Ante la carga del Batallón Ligero a las órdenes del teniente coronel Brownrigg, desbanda a las fuerzas de Sobremonte quien (como en Buenos Aires) huye con su caballería hacia la campaña oriental, entre el arroyo de Seco y el Cerrito.

Las tropas españolas que retornaron a Montevideo, no dejaron de criticar vivamente la actitud del virrey.

Sin enemigos a la vista, Lumley llegó a Tres Cruces y vivaquearon frente a la ciudad.

Dentro de los muros de Montevideo, mientras tanto, se estaba por tomar una decisión militar de importancia crítica para los futuros acontecimientos. Pese a la oposición del Cabildo de Montevideo, la presión del pueblo y de la tropa forzaron al gobernador Ruiz Huidobro a intentar una salida de la ciudad, para sorprender a los ingleses.