30.1.07

jueves, 30.01.1807 – se redobla el ataque

Consciente de la llegada de las fuerzas porteñas, Auchmuty apura las acciones para tomar Montevideo. Emplaza una batería de seis piezas de artillería de 24 libras, con el objeto de hacer una brecha en la muralla y lanzar sus tropas al asalto. Pese al intenso fuego enemigo, los ingleses logran efectuar una brecha de once metros, a 100 metros del reducto de la costa, en el cubo Sur.

Mientras esta acción se lleva a cabo, Liniers desembarca en Conchillas, en la Banda Oriental. Pese a que Sobremonte estaba al tanto de la llegada de las fuerzas de Buenos Aires, no había, tampoco ahora, nadie para recibirlos. Liniers despacha un chasqui al gobernador Ruiz Huidobro informándole del desembarco y de que esperaba llegar en cuatro días a Montevideo, pese a que el virrey no había preparado nada para recibirlos.

29.1.07

miércoles, 29.01.1807 – desoyen a Sobremonte

Las tropas de Arce llegan a Rosario, donde contactan a un edecán de Sobremonte que les ordena detener la marcha a Montevideo para reunirse con las tropas del virrey en Las Piedras. Arce desoye la orden del virrey y continúa su marcha a Montevideo.

Es te mismo día, Liniers zarpa con los segundos refuerzos, 1500 hombres. Liniers había pedido voluntarios a los cuerpos formados tras la Reconquista. Como todos querían ir, eligió llevar destacamentos de cada cuerpo y, en forma total, al tercer escuadrón de Húsares. Junto a Liniers iban 600 hombres de los Patricios, al mando de Cornelio Saavedra.

miércoles, 29.01.1807 – reacciona el león británico

Al conocerse en Londres, la noticia de la Reconquista de Buenos Aires, el gobierno británico reacciona para retomar la ciudad. La primera medida es enviar un navío veloz a Ciudad del Cabo, el sloop Fly para informar a Craufurd que abortara su expedición a Chile y fuera al Río de la Plata a ayudar a Auchmuty en la retoma de la ciudad.

Al mismo tiempo, el gobierno le pide a Wellesley un informe sobre el tema, memorándum que éste entrega el 29 de enero. En el informe, Wellesley augura que Auchmuty, con la ayuda de Craufurd y los refuerzos proporcionados por Baird en Ciudad del Cabo, habrían tomado Montevideo, confiando que luego caería Buenos Aires. Consideraba necesarias cerca de 1.200 hombres de infantería y 400 de caballería, para mantener la Banda Oriental; para Buenos Aires, calculaba 2.500 y 1.000 respectivamente; para Córdoba: 1.500 y 700. En total, más de 7 mil hombres para dominar el Virreinato del Río de la Plata.

Ante la conjunción de tres generales de brigada en el Río de la Plata (Auchmuty, Craufurd y Lumley), Wellesley recomendó el envío de dos buenos generales de habilidad y rango superior, proponiendo al más antiguo como gobernador y el segundo, al mando del anterior, comandando las tropas.

Los dos generales elegidos por el gobierno, distarían de la figura de militar que Wellesley tenía en mente.

28.1.07

martes, 28.01.1807 – ataque en la muralla del sudeste

Los británicos iniciaron un ataque sobre la muralla sudeste de la ciudadela de Montevideo, con un fuego de una batería de seis piezas de 24 libras. Pese a que el parapeto quedó en ruinas, la muralla no sufrió daños mayores.

martes, 28.01.1807 – nota de Canning

“No me gusta el asunto de Popham. Está en un tembladeral del que espero vea él una salida porque yo no la veo. La gente, en esta parte del mundo, ha perdido mucho por su culpa y yo nada he ganado”.

Carta de George Canning, tesorero de la armada en la época del gobierno de Pitt, futuro Ministro de Relaciones Exteriores británico.

27.1.07

lunes, 27.01.1807 – marchan las tropas de Buenos Aires

Aunque nadie estaba para recibirlos, las tropas de Buenos Aires emprendieron la improvisada marcha hacia Montevideo.

26.1.07

domingo, 26.01.1807 – Montevideo no se rinde

El Cabido llamó a una junta de guerra para tratar la rendición. Pero el pueblo y los soldados interrumpieron la reunión, al punto que los cabildantes temieron por su vida.

Ese mismo día, cerca del cerro de San Juan, al norte de Colonia, desembarcaron las primeras tropas de Buenos Aires. Nadie los recibió y no se habían coordinado la provisión de caballadas y alimentos para las tropas.

El Cabildo de Buenos Aires, también en este día, decidió que mientras Liniers estuviera en la Banda Oriental obraría “de acuerdo con el Sr. Gobernador de Montevideo y con absoluta independencia de otra cualquiera autoridad, en la expedición que ha de comandar”. Esto es: no aceptaría órdenes de Sobremonte.

25.1.07

sábado, 25.01.1807 – comienza el fuego sobre Montevideo

Empieza el bombardeo inglés sobre Montevideo. Una batería de cuatro piezas de 24 libras, dos morteros de diez pulgadas y los barcos de la flota que podían arrimarse a la costa, iniciaron un intenso cañoneo sobre la ciudad, esperando que ésta se rindiese.

sábado, 25.01.1807 – confirman la caída de Buenos Aires

El gobierno británico confirma, oficialmente, la reconquista de Buenos Aires.

24.1.07

viernes, 24.01.1807 – zarpa Michelena

A la noche, zarpa el capitán Michelena con la expedición Arce, junto a los 511 hombres que van a defender a Montevideo del ataque inglés. Con él van Balcarce e Hilarión de la Quintana.

23.1.07

jueves, 23.01.1807 – refuerzo de Buenos Aires

En congreso, el Cabildo, la Audiencia y Liniers decidieron el envío de tropas a Montevideo, asediada por los ingleses. Inmediatamente irían 500 hombres comandados por Arce y, a los pocos días, otros 1.500 al mando de Liniers, dejando a Balbiani al mando de la guarnición de Buenos Aires.

20.1.07

lunes, 20.01.1807 – noticias de la Reconquista

La noticia de la Reconquista de Buenos Aires llega a Madrid, tras largas peripecias. Originalmente, el barco español Aranzazu llevaba la noticia de la reconquista de la ciudad, pero el navío cayó en poder de los ingleses. Sin embargo, poco después, los españoles recapturarían la nave, obteniendo, recién allí, las noticias de lo que había sucedido en el Río de la Plata.

lunes, 20.01.1807 – contraataque español

En la madrugada del 19 al 20, se efectúa la salida de las tropas de Montevideo, para atacar a los ingleses. Ruiz Huidobro reúne 2362 hombres al mando del brigadier de ingenieros Bernardo Lecoq, secundado por el coronel Javier de Vianna en una arriesgada maniobra, que dejaría sin defensa la ciudad. El objetivo era que la columna Montevideo arrollara el ala izquierda del ejército inglés, mientras que la caballería del virrey Sobremonte (alrededor de 1700 hombres), marchando entre el ejército inglés y el río, lo incomunicara de la escuadra naval.

Las fuerzas de Montevideo salieron por el camino del Cordón hasta Rivera, donde encontraron la primera oposición frente a la imagen del Cristo del Cordón (ícono emplazado al costado del camino), una avanzada de 400 hombres que los defensores de la ciudad hicieron retroceder. El coronel Browne reforzó al ejército inglés con tres compañías, para frenar el avance español.

Auchmuty vio una oportunidad favorable. El ejército español todavía se hallaba encolumnado en una calle rodeada de cercos de tuna y maizales de gran altura. Dispuso que el Batallón Ligero provisorio y los Rifleros (regimiento 95) formaran paralelamente al enemigo, infiltrándose entre los maizales, para caer de improviso, sobre su flanco izquierdo.

La habilidad de las tropas británicas para esta maniobra, decidió la batalla: el ataque sorpresivo deshizo las tropas españoles que huyeron, en desbandada, hacia Montevideo. El ataque posterior inglés fue una matanza: cerca de 200 muertos y 400 heridos españoles contra, apenas, 149 bajas inglesas.

“Las consecuencias de este combate fueron mayores que la acción en sí” reporta Auchmuty en su parte “En vez de encontrarnos rodeados de caballería y en guerrilla continua, muchos de los habitantes del país se separaron y se retiraron a sus pueblitos, y se nos permitió, con toda calma, iniciar el sitio”.

Es de destacar, como señala Carlos Roberts que idéntica maniobra, con similar resultado, intentaría el General Paz, en 1844, rechazado por las tropas de Oribe y Pacheco en el mismo lugar que Auchmuty lo hiciera con Lecoq en 1807.

Esa misma tarde, Auchmuty fija su campamento definitivo, entre el arroyo de la Aguada y el Río de la Plata, tomando posesión de los pozos de aguas cortando la provisión de agua para la ciudad, pues Montevideo (edificada sobre granito) no tenía pozos, sólo aljibes que reservaban las aguas de lluvia, escasos para abastecer a toda la ciudad.

Ese mismo día, el enviado del Cabildo de Montevideo llegaba a Buenos Aires para pedir ayuda.

19.1.07

domingo, 19.01.1807 – la marcha a Montevideo

Tras el desembarco, Auchmuty decide la marcha hacia Montevideo, para iniciar el sitio de la ciudad. Divide sus fuerzas en tres columnas. La primera está al mando del general Lumley (con lo mejor de su ejército); la segunda, al mando del coronel Browne. Backhouse queda en la retaguardia, con una pequeña reserva.

Auchmuty se suma a la columna de Lumley y espera vivaquear, esa misma noche, en las lomas que dominaban la ciudad, en las Tres Cruces. Browne y Backhouse debían seguirlos, pero sin apurar la marcha, para apoyarlos en caso de que fuera necesario.

A poco de avanzar, la columna Lumley es atacada por los hombres de Sobremonte, poco más de mil soldados, con la caballería de Allende a ambos flancos.

Ante la carga del Batallón Ligero a las órdenes del teniente coronel Brownrigg, desbanda a las fuerzas de Sobremonte quien (como en Buenos Aires) huye con su caballería hacia la campaña oriental, entre el arroyo de Seco y el Cerrito.

Las tropas españolas que retornaron a Montevideo, no dejaron de criticar vivamente la actitud del virrey.

Sin enemigos a la vista, Lumley llegó a Tres Cruces y vivaquearon frente a la ciudad.

Dentro de los muros de Montevideo, mientras tanto, se estaba por tomar una decisión militar de importancia crítica para los futuros acontecimientos. Pese a la oposición del Cabildo de Montevideo, la presión del pueblo y de la tropa forzaron al gobernador Ruiz Huidobro a intentar una salida de la ciudad, para sorprender a los ingleses.

18.1.07

sábado, 18.01.1807 – el Cabildo de Montevideo pide ayuda a Buenos Aires

El Cabildo de Montevideo formalizó el pedido de 2 mil hombres al Cabildo de Buenos Aires, para defender la ciudad del ataque inglés. A tal fin, dispone el envío de un emisario a Buenos Aires, con la nota correspondiente.

sábado, 18.01.1807 – continúa el desembarco inglés

Apenas incomodados por las fuerzas de Sobremonte, continuó durante toda la jornada el desembarco inglés. Poco más de 6 mil hombres, descargaron el equipo y lo trasladaron a las alturas, pese al dificultoso terreno arenoso de los médanos.

Carlos Roberts hace notar que se le oponía un similar número de defensores, con menos disciplina táctica que los ingleses, pero que estaban en poder de las fortificaciones desde dónde se podían atacar a los invasores. Más aún, cuando Auchmuty estaba obligado a tomar Montevideo en un breve plazo, ante la posibilidad cierta de la llegada de refuerzos desde Buenos Aires.

Extrañamente, cinco años antes, Sobremonte (entonces comandante general de armas del Virreinato) dispuso un simulacro de ataque enemigo, en la playa Ramírez, cercana a Montevideo, donde las fuerzas defensores repelieron el ataque enemigo al subir la barranca. En 1807, no se le ocurrió repetir el modelo defensivo que había probado su eficacia en el ejercicio de un lustro antes.

17.1.07

viernes, 17.01.1807 – Times confirma la caída

En el día de hoy, The Times confirma el rumor sobre la caída de la colonia británica de Buenos Aires.

16.1.07

jueves, 16.01.1807 – desembarco inglés en la Banda Oriental

Auchmuty desembarca en costas uruguayas, a unos diez kilómetros de Montevideo, entre las rocas de Carretas y Punta Carretas, lugar protegido por los médanos del bombardeo español. La flota inglesa, a su vez, bombardeó durante el desembarco las defensas españolas en las alturas de la Punta Carretas.

A una legua de allí, en los terrenos altos detrás de la laguna del Buceo, Sobremonte destacó al coronel Allende con 800 lanceros y 6 piezas de artillería para impedir el desembarco inglés. En una réplica de lo que había sucedido en Buenos Aires, tras una débil oposición, con unas cuantas bajas en su haber, Allende se retiró, dejando a los ingleses desembarcar, casi sin oposición, durante los dos días siguientes.

14.1.07

martes, 14.01.1807 – intimación a Montevideo

Auchmuty y las tropas inglesas fondean, al atardecer, en la isla de Flores, en las cercanías de Montevideo. Por la mañana, Stirling y Auchmuty habían enviado a una nave menor, con bandera de parlamento, intimando a la ciudad a la rendición. “Señor: Teniendo bajo mis órdenes fuerzas suficientes, pertenecientes a S.M.B., y habiendo recibido instrucciones para atacar el territorio español en el Río de la Plata, quiero tener el honor de intimarle a V.E. la rendición de la fortaleza de San Felipe (Montevideo) y sus dependencias, con el grande deseo de salvar la efusión de sangre y evitar a los inocentes habitantes las miserias que atrae una pertinaz defensa”.

La intimación fue rechazada por Sobremonte quien lo consideró “un insulto a nuestro honor y a la lealtad que profesamos a nuestro amado soberano el rey de España, de que nos gloriamos; así pues por tan dignos objetos todos sus vasallos miran la efusión de su sangre, y la entrega de su aliento, como el más gustoso sacrificio, antes de desmentirla en un ápice”.

13.1.07

lunes, 13.01.1807 – embarcan las tropas de Backhouse

Auchmuty se informó del teniente Backhouse de su precaria situación en Maldonado, cercado por los gauchos que lo hostigaban permanentemente. El mal estado de los caballos ingleses y el conocimiento de los paisanos de la Banda Oriental, impedían que Backhouse pudiera salir a batirlos en campo abierto. Auchmuty decidió embarcar a todas las tropas de Maldonado, con rumbo a Montevideo, dejando sólo una pequeña guarnición en la isla de Gorriti.

11.1.07

sábado, 11.01.1807 – zarpa Craufurd

Tras esperar, en vano, cuatro semanas en Cabo Verde, al almirante Murray, temiendo que éste hubiera naufragado, Craufurd zarpa de Cabo Verde, rumbo a Ciudad del Cabo. Murray llegaría a Cabo Verde, al día siguiente.

10.1.07

viernes, 10.01.1807 – Rodríguez Peña

Como respuesta al reclamo de las “asignaciones de prisionero” realizadas por Beresford el 28 de diciembre de 1806, Liniers envió los fondos demandados con una esquela en la que declaraba: “El portador de esta que lo es el capitán Dn. Rodríguez Peña lleva el haber correspondiente a la asignación de los oficiales ingleses del mes de diciembre”.

Esta excusa administrativa le daba a Rodríguez Peña, anglófilo reconocido, la posibilidad de discutir la posible emancipación del Río de la Plata con el protectorado del Imperio Británico.

Acá hay que señalar la importancia de las logias masónicas británicas que trabajaron junto al grupo independentista (los hermanos Rodríguez Peña, Manuel Padilla, Sarratea, Castelli, Vieytes, Belgrano, Pueyrredón, Beruti, Moreno, los hombres que harían la Revolución de 1810) para separar a Buenos Aires de España.

6.1.07

lunes, 06.01.1807 – el 9 de Dragones se separa de la expedición Craufurd

El regimiento 9 de Dragones, perteneciente a la expedición de Auchmuty, retrasado en su salida, había acompañado al convoy de la expedición de Craufurd, hasta llegar a la isla de Cabo Verde. El 6 de enero, el 9 de Dragones, junto a otros barcos mercantes, se separa de la flota de Craufurd y pone rumbo al Río de la Plata, con la protección del Nereide.

5.1.07

domingo, 05.01.1807 – llega Auchmuty a Maldonado

Proveniente de Río de Janeiro, donde se había reaprovisonado, al enterarse de la caída de Buenos, Sir Samuel Auchmuty llega a Maldonado con más de 3600 hombres. En los días siguientes hablará con Stirling y Backhouse poniéndose al tanto de la situación en el Río de la Plata.

2.1.07

jueves, 02.01.1807 – noticias de Buenos Aires

El gobierno inglés recibe de su ministro en Lisboa, Lord Strangford, las noticias del mismo rumor que días antes informara el Times sobre la caída de la colonia británica de Buenos Aires.